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El amor por el café es un sentimiento que cada vez más personas comparten. Pasar una tarde con buena compañía charlando o simplemente a solas disfrutando todo ese sabor y aroma que la madre tierra nos ha regalado.
El café ha sido por muchos siglos la bebida favorita de miles de personas. Prohibido para algunos, afrodisíaco para otros, lo cierto es que el café es una de las bebidas estimulantes con mayor aceptación en el mundo occidental.
Pero, acaso ¿cualquier café puede brindarte una experiencia única de sabor? De ninguna manera, el café qué se lleva todos los méritos en esa categoría es el café de especialidad, aunque no muchos lo conocen.
Eso sí, te garantizamos que una vez que probéis la primara taza hecha con este café, no querrás volver atrás, porque el café de especialidad siempre llega para quedarse. Conoce con nosotros que es el café de especialidad, por qué es tan diferente al café comercial y por qué vas a preferirlo de aquí en adelante.
¿Qué es el café de especialidad?
Muchas son las definiciones que giran en torno al café de especialidad. Sin contar que varían a lo largo del mundo entero. Y aunque ciertamente existe una definición técnica de este tipo de café, nos hará bien hacer revisión de las diversas opiniones para entender mejor de qué se trata todo esto.
Así como existen diferentes granos de café, así también existen diferentes catas, diferentes métodos de preparación y muchos otros elementos para diferenciar el mejor café de especialidad que se pueda encontrar.
No es suficiente separar los granos que luzcan bien. Escoger los granos perfectos para obtener el mejor café de especialidad implica vivir apasionado por el café. Muy pocos comprenden todo el trabajo que hay detrás de una buena taza de café.
La definición técnica del café de especialidad es que se trata de un café tipo Arábica con una puntuación de catación de taza de 80+ puntos. Es decir, cualquier café que obtenga más de 80 puntos en su catación es considerado café de especialidad. Vale la pena aclarar que todos los granos de café se califican en base a 100. Esta calificación se denomina catación. Quienes elaboran esta calificación es la SCA por sus siglas en inglés de la Specialty Coffee Association.
Ahora bien, para que un grano de café sea calificado como café de especialidad, debe catarse por un Q grader certificado. De hecho, esta calificación es la diferencia fundamental entre el café gourmet y el café de especialidad.
Pues, aunque ciertamente podemos encontrar un café gourmet de la más alta calidad, también se puede encontrar del tipo que lleva el nombre por mero mercadeo. Esto sucede porque el café gourmet no se define de una manera tan estricta como el de especialidad.
¿La calidad del café de especialidad se trata solamente del grano?
La respuesta a esta pregunta es un rotundo no. Aunque ciertamente la evaluación o calificación se hace a partir del grano. En realidad los productores de este tipo de café, deben prestar muchísima atención a cada etapa del proceso. Solamente así se podrá asegurar la calidad del mismo.
Ciertamente los granos seleccionados no pueden tener muchos defectos. Pero, para lograr esto es necesario cultivar las plantas minuciosamente y cosechar el café en el momento oportuno. De igual modo, los productores deben tener las mejores prácticas de procesamiento del grano. Así como también deberán seguir los protocolos de almacenaje pertinentes.
Cada etapa del proceso es vital para que la experiencia final sea realmente de otro mundo. Por ello, todo no acaba con la producción del grano de café de calidad. Una vez obtenido el grano, entra en escena su tostado y preparación final. Así que para disfrutar de un buen café de especialidad importa cada paso que se da desde el campo a la taza.
Diferencias básicas entre el café de especialidad y el comercial
Muchas son las diferencias que podemos encontrar entre una taza de café realizada con un grano de especialidad y uno comercial. Sin embargo, destacaremos la de mayor relevancia, comenzando por su sabor y aroma.
Sabor y aroma
Por ejemplo, es de notar que en los cafés de especialidad se puedan percibir notas frutales, de chocolate o de frutos secos. Esos sabores son detectables en el. No pasa lo mismo con el café comercial, que tiende a ser amargo y se hace difícil distinguir matices en él.
Especie del grano
Otra diferencia de gran importancia es la especie del grano que se utiliza en el uno o el otro. Pues, mientras que el café de especialidad debe ser 100% del tipo Arábica, el café comercial muchas veces se encuentra mezclado con la especie robusta. Esto es así porque los precios del café de tipo robusta son más bajos, ya que la selección de sus granos no es tan minuciosa y se utilizan para su producción muchos granos defectuosos.
Proceso de calidad
Como ya mencionamos, todo el proceso en el negocio del café es importante. Más cuando se trata del café de especialidad en que cada fase del proceso cuenta. Desde la recolección manual de su cosecha en el tiempo preciso. Su lavado y fermentación minuciosas hacen que su recorrido por los controles de calidad sea más arduo en comparación que el que normalmente transita un café de calidad comercial.
Su tostado
Otro factor importante es el tostado. Pues, mientras un café comercial puede llevar meses tostados en su empaque, quienes comercializan el café de especialidad se esmeran en ofrecer a sus clientes un café recién tostado. De hecho, es importante resaltar que los cafés de menor calidad pasan por tuestes más largos. Vuelven el grano más oscuro. Esto lo hacen con el fin de unificar los sabores para enmascarar precisamente el sabor de los granos defectuosos.
Así que, de aquí en adelante lee las etiquetas. Los cafés de especialidad te informarán en ellas su fecha de tueste y su origen. Así como también la finca en la que fue cosechado y la altura a la que fue cultivado. De igual modo podrás conocer todo su proceso y por supuesto la variedad a la que pertenece. Eso sí, mucho cuidado, una vez que pruebes el café de especialidad, no querrás volver a probar un café de menor calidad. Por eso decimos que el mejor café de calidad siempre llega para quedarse.